El diagnóstico genético preimplantacional (DGP) es una técnica complementaria que se aplica en los tratamientos de fecundación in vitro (FIV). Gracias a este análisis, es posible detectar los embriones sanos, portadores y afectos de una enfermedad. Así se transferirán los embriones sanos, que serán los que mayor probabilidad de embarazo tendrán.
Por ello, el DGP está indicado cuando existen antecedentes genéticos de alguna patología hereditaria o fallos de implantación. Además, en mujeres de edad avanzada es conveniente el DGP puesto que los óvulos tienden a acumular alteraciones que no son capaces de reparar.
Otra situación en la que también se recomienda hacer DGP a los embriones es en los casos de abortos de repetición.
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Última actualización: 29/06/2022
