En primer lugar, la mujer debe visitar a un especialista para que le solicite un estudio de fertilidad femenino.
Si la mujer no está buscando un embarazo, sólo es necesario realizar una ecografía vaginal y una citología. A través de estas pruebas se determina si la mujer presenta alguna anomalía uterina u otra patología. Además, se recomienda realizar un estudio hormonal para valorar la reserva ovárica de la mujer.
Si la mujer lleva un año manteniendo relaciones sexuales no protegidas de manera regular y no ha logrado un embarazo, sería conveniente realizar una histerosalpingografía y un estudio del cariotipo.
Puedes leer el artículo completo en: ¿Cuáles son las pruebas de fertilidad en la mujer y en qué consisten? ( 80).
Marta Barranquero Gómez
Graduada en Bioquímica y Ciencias Biomédicas por la Universidad de Valencia (UV) y especializada en Reproducción Asistida por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) en colaboración con Ginefiv y en Genética Clínica por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH).