Hasta hace relativamente poco tiempo, la selección embrionaria se hacía teniendo en cuenta únicamente los aspectos morfológicos. En este caso, se tenía en cuenta el número de células, el número de núcleos, si presentaba fragmentación, etc.
Sin embargo, gracias a la revolución en el campo de la reproducción asistida, en la actualidad existen incubadores que permiten observar el desarrollo de los embriones en tiempo real. Esto permite un estudio morfocinético de los embriones, lo que mejora la selección embrionaria.
Puedes leer el artículo completo en: ¿Cómo se realiza la selección del mejor embrión? ¿Qué se valora? ( 59).
Marta Barranquero Gómez
Graduada en Bioquímica y Ciencias Biomédicas por la Universidad de Valencia (UV) y especializada en Reproducción Asistida por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) en colaboración con Ginefiv y en Genética Clínica por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH).