Varios destinos de gestación subrogada permiten que una mujer sola realice un tratamiento. Sin embargo, tiene que tener especial cuidado y comprobar que podrá conseguir el reconocimiento de la filiación en su país. En efecto, muchos países todavía consideran única y exclusivamente la mujer que ha dado a luz como la madre legal y eso puede originar problemas legales.
En el caso de mujeres españoles, tienen que ir a países que establecen la filiación mediante una sentencia judicial reconocida como válida por la Dirección General de Registros y del Notariado (DGRN), como Estados Unidos y Canadá.
Por otro lado, los hombres solteros pueden aportar el semen (salvo que exista algún problema de fertilidad) para asegurar la relación genética, aunque será necesario una donante de óvulos para llevar a cabo la fecundación en el laboratorio.