La primera prueba que realizará el especialista ante una sospecha de un posible cáncer uterino será una ecografía transvaginal. Además, si fuera necesario, procedería a llevar a cabo una dilatación y curetaje. De esta forma, extraería una muestra para analizarla en el laboratorio y observar si hay presencia de células malignas.
En otras ocasiones se opta por realizar una biopsia endometrial.
Hacemos un gran esfuerzo para ofrecerte información de máxima calidad.
🙏 Por favor, comparte este artículo si te ha gustado. 💜💜 ¡Nos ayudas a seguir!